Inteligencia Artificial (IA) + Inteligencia emocional (IE) + Inteligencia Relacional (IR) = TRIPLE INTELIGENCIA
Vivimos en un mundo “inteligente” en constante cambio, que evoluciona a un ritmo frenético.
Los humanos solemos percibir los avances tecnológicos de dos maneras: como oportunidades o como amenazas, depende como se mire, es decir sin duda la máquina nos puede ayudar con su AI y machine learning asociado, pero… ¿Y si las máquinas toman el control y se apoderan de nuestras emociones?
Por ejemplo en la manera de comunicar, de expresar o de sentir. ¿Qué pasaría si una máquina fuese capaz de darte un abrazo? Por muy inteligente que sea, sentirías lo mismo que cuando abrazas a un ser querido?
¿Podría ocurrir que nuestra vida social y manera de relacionarnos pase a basarse solamente en interacciones digitales?
La respuesta es no. Las personas somos únicas e inimitables, porque estamos hechos de amor, emociones y sentimientos, no de ceros y unos. Un algoritmo informático nunca puede replicar los valores humanos, tal y como son percibidos por nuestro corazón.
¿Llegaríamos a un futuro no muy lejano, donde podrían llegar a desaparecer la gran mayoría de profesiones que conocemos y ejercemos hoy en día?
¿Se quedarán los ilustradores sin trabajo ante las prodigiosas creatividades que crean los distintos programas de Inteligencia Artificial aplicada al diseño, como Dall-E mini? ¿Despedirán a miles de copywriters y redactores de contenido de las agencias de comunicación ante la fuerza de ChatGPT?
La respuesta es… depende.
La Inteligencia Relacional es aquella que conecta a seres humanos, porque ninguna máquina puede sustituir el poder de un abrazo, de una mirada, de una sonrisa en el momento justo. Quizá la IA pueda decir las palabras correctas, pero su «te quiero» siempre será vacío y artificial.
Para dar cabida a todo lo anterior, surge un nuevo concepto IR + IE + IR, cuyo resultado es una triple inteligencia al servicio de las PERSONAS.
Dicho de otra manera, disponemos del triple de recursos para alcanzar el éxito en todas las esferas, dándonos la gran oportunidad de ser más felices y evolucionar como especie a través del respeto, el amor y la confianza.
Depende de nosotros.
El futuro será lo que construimos hoy y ahora.